Día de la Inmunología: desarrollar mejores vacunas para microorganismos es el desafío principal

Expertos plantean que con la pandemia de covid-19 se hizo más evidente el aporte de esta ciencia a la salud humana. En ese sentido, explican que “si bien el estándar ideal es el desarrollo rápido de vacunas ante eventuales pandemias, podrían generarse nuevos microorganismos contra los cuales nunca antes hemos estado expuestos y que no necesariamente tendrán inmunizantes en breve tiempo”.

Hallar vacunas para microorganismos de enfermedades aún sin cura y avanzar en el acceso de la población a los inmunizantes, dada la gran desigualdad que hay en este ámbito, son dos de los principales desafíos para la inmunología en este momento, plantean científicos del Instituto Milenio en Inmunología e Inmunoterapia (IMII).

Los investigadores abordaron el presente de la disciplina, con motivo de la próxima conmemoración de su Día Mundial, el 29 de abril, para divulgar la importancia de la inmunología en la lucha contra las infecciones, la autoinmunidad y el cáncer, así como para promover los beneficios de la investigación en este campo.

Covid-19 y conocimiento acumulado
Los doctores Alexis Kalergis, Leandro Carreño, Pablo González y Susan Bueno coinciden en que la disciplina ha vivido un significativo crecimiento en interés y notoriedad pública a raíz de la pandemia de COVID-19.

“Con esta pandemia se hizo evidente el aporte de la inmunología a la salud, pues fue una situación que afectó toda la población, de modo que los temas contingentes relativos a la inmunología han estado mucho más presentes ”, comenta Kalergis, doctor quien ha liderado desde el IMII el desarrollo de prototipos de vacunas contra el SARS-CoV-2.

En este punto, Susan Bueno, destaca que gracias al avance de la inmunología se ha logrado abordar problemas de salud que sin duda que dejo expuesto el Covid-19. “Un siglo atrás hubiera causado más muertes y casos, como lo que pasó con la gripe española en 1918.  Entonces, fue muy diferente lo que ocurrió en cuanto al desarrollo de vacunas, la implementación de medidas y el control de la pandemia”, sostiene.

Asimismo, agrega que “la generación de inmunizantes y la vacunación han permitido que ya no pensemos ni hablemos de males que antes producían un gran impacto en la población, como la poliomielitis, el sarampión, el coqueluche, la difteria y el tétano, entre otros”.

Leandro Carreño, director alterno del IMII y académico de la Universidad de Chile,  indica que “toda la información recogida posibilitó que, cuando se generó el primer brote del síndrome respiratorio agudo grave en 2003, la metodología desarrollada para vacunas fuera aplicada y felizmente dicho brote no se convirtiera en pandemia, ocasionando no más de 8.100 casos y 774 muertes”.

En este contexto, afirma, que hubo conocimiento suficiente para aplicarlo a nuevas enfermedades infecciosas relacionadas, lo que nos permite hoy tener a gran parte de la población vacunada contra el SARS-CoV-2 e ir superando la pandemia de Covid-19.

Velocidad en el desarrollo de vacunas
Otro tema abordado por los expertos es la velocidad con que la ciencia pudo tener, tras declarada la emergencia global debido al COVID-19, vacunas contra el SARS-CoV-2.

“Adaptar vacunas a nuevos patógenos permite una acción rápida. Sin embargo, esto no significa que emerjan nuevos patógenos, o que los patógenos no puedan evolucionar y, así, generarse nuevos microorganismos contra los cuales no hemos estado expuestos, por ende, no conocemos la respuesta de nuestro sistema inmune a ellos”, indica Kalergis

De todos modos, el científico resalta que, frente a enfermedades infecciosas, “se ha demostrado que el uso de vacunas es la medida más efectiva, acompañada de la contención, la trazabilidad y la identificación del genoma de los microorganismos conducente al desarrollo de inmunizantes”.

La doctora Bueno, por su parte, recuerda que “hay enfermedades causadas por microorganismos para las cuales aún no se ha podido desarrollar una vacuna, como el virus de inmunodeficiencia humana (VIH). A pesar de los esfuerzos científicos, no tenemos todavía una, y hay enfermedades que por ahora son controladas solo vía fármacos, lo cual pone de manifiesto que es importante que se haga ciencia multidisciplinar”.

Pablo González, profesor asociado de la UC, quien trabaja en nuevas soluciones contra el virus herpes simple, para el cual no existe vacuna, coincide con lo anterior.

“La extensión de la inmunología hacia otras disciplinas y sub-disciplinas provee información experimental muy valiosa y nuevas perspectivas que podrían traducirse en estrategias de inmunización novedosas para contrarrestar los mecanismos de evasión”.

A propósito, Carreño indica que hay dos grandes desafíos para la inmunología en el presente. En primer lugar, desarrollar vacunas contra microorganismos que no poseen aún, o mejorar las que hay y en segundo lugar, alcanzar la equidad en la distribución de vacunas, para fomentar la accesibilidad a todo el mundo y controlar la enfermedades.

Conciencia en la población
Los investigadores ponen de relieve que el hecho de que la inmunología esté más presente en la opinión pública incide en que la población general entienda mejor la relevancia del sistema inmune y cómo este funciona, habiendo múltiples condiciones que lo podrían afectar y de las que muchos no están conscientes.

Respecto al contexto de  la inmunología en Chile, Kalergis destacó las iniciativas que ayuden a viabilizar la importancia de la inmunología, a través del trabajo colaborativo de distintos científicos. Además, la difusión de información es un aspecto fundamental para que la población tome conciencia.